Revista Kuaapy Ayvu, vol. 12, núm. 12, año 2021,
pp. 13-37. INAES Publicaciones. ISSN 2224-7408. CC BY NC SA 4.0
___________________________________________
Recibido el 22/10/2021 - Aceptado el 20/12/2021
Dossier: Educación superior II
Acceso y desafiliación en
las políticas de educación superior.
Notas
sobre la Universidad Nacional de Asunción
Access and disaffiliation in higher
education policies. Notes on the case of the National University of Asuncion
Luis Ortiz Sandoval
Instituto de Ciencias Sociales
[ICSO], (Asunción, Paraguay)
l.ortizs@yahoo.com
https://orcid.org/0000-0002-1902-8834
Rodrigo Brítez
Instituto
de Ciencias Sociales [ICSO], (Asunción,
Paraguay)
britezcarli@gmail.com
https://orcid.org/0000-0003-3137-6396
Resumen
La universidad paraguaya (en especial la Universidad Nacional de
Asunción) ha atravesado una serie de transformaciones como resultado de los
procesos de expansión del sistema universitario nacional. Estos procesos han
generado demandas asociadas a la ampliación de oportunidades educativas,
afectando los discursos tradicionales que legitiman el acceso. En consecuencia,
en las últimas décadas ha surgido un desarrollo incipiente de programas
diseñados para promover el acceso y retención entre grupos sociales que
enfrentan situaciones desfavorecidas. La organización de la UNA, en cuyo seno
tienen lugar las trayectorias educativas de los ingresantes, da cuenta de la
existencia de una compleja variedad de situaciones y adaptaciones
institucionales reflejadas en la adopción de programas de subvenciones y
remediales, donde los limitados recursos previstos se traducen en
transferencias indirectas dirigidas a una parte minoritaria de la población
estudiantil. Todo esto da cuenta de indicios de políticas de inclusión que,
dadas sus limitaciones, no permiten abordar de manera sistemática los problemas
de acceso, permanencia y egreso de sectores sociales desfavorecidos de la
población estudiantil.
Palabras clave
Acceso a la educación superior; desigualdad; Universidad Nacional de
Asunción; políticas educativas; subvenciones
Abstract
Paraguayan
universities, especially the National University of Asunción, have undergone a
series of transformations due to the expansion processes within the university
system. These processes have generated a series of demands associated with the
expansion of educational opportunities, which have affected the traditional
discourses that legitimize access. Consequently, in recent decades, there has
been an emerging development of programs designed to promote access and
retention among social groups facing disadvantaged situations. The organization
of the National University of Asuncion, within which the educational paths of
new students take place, reveals the existence of a complex variety of
situations and institutional adaptations reflected in the adoption of subsidy
and remedial programs. In these programs, the limited available resources
result in indirect transfers targeted towards a minority portion of the student
population. All this shows signs of inclusion policies which, given their
limitations, do not allow for systematically addressing the problems of access,
permanence and exit of disadvantaged sectors of the student population.
Keywords
Access to
higher education, inequality, National University of Asunción, educational
policies, grants
1.
Introducción
El proceso de
masificación de la matrícula universitaria es un fenómeno que ha afectado el
modo en el que las instituciones universitarias, en especial las universidades
públicas, son confrontadas con nuevas demandas y reformulaciones de su misión a
partir del cambio de expectativas sociales en torno al acceso a la educación
superior. Esto tiene relación con la expansión de oportunidades educativas
asociadas a procesos de democratización resultantes de nuevas demandas en torno
al derecho a la educación a nivel mundial.
En particular
el caso de la universidad pública paraguaya da cuenta de las contradicciones
existentes en las respuestas generadas para atender a grupos poblacionales que
tradicionalmente eran excluidos de oportunidades educativas universitarias en
Paraguay.
Las políticas
públicas educativas e institucionales, en orden a atender situaciones de
desigualdad social y de otros tipos en el acceso, permanencia y finalización de
estudios universitarios, se vuelven un punto crucial de atención para
comprender el modo en el cual el Estado ha respondido o ignorado estas
demandas. En particular las estrategias que buscan atacar el fenómeno de
la «desafiliación» estudiantil entendida «como el último y más visible
resultado de un proceso en el que se objetiva la decisión de una persona de no
continuar rigiendo (parte de) su vida por las instituciones de la Enseñanza (…)
Superior» (Fernández, 2009, p. 167) resultan de particular relevancia para
entender la naturaleza y alcance de las respuestas generadas desde la universidad
pública.
A este
respecto, resulta adecuado introducir la trayectoria y el espacio en el cual la
universidad pública en Paraguay está inserta, que de cierto modo dan indicios
sobre las políticas institucionales de acceso y apoyo a estudiantes en riesgo
de desafiliación y su funcionamiento.
La base de
legitimidad de la universidad paraguaya, en especial de la Universidad Nacional
de Asunción, como institución de élite con monopolio en la transmisión de
conocimientos, se hallaba precarizada antes de su expansión. Este hecho se
explicaba por su reducida matrícula y la ausencia de otras universidades que
desnudaran sus problemas y limitaciones. La apertura de entidades de educación
superior implicó la ampliación del acceso de modo que la legitimación de la
universidad como institución de transmisión de conocimientos y de formación
profesional, entró en crisis debido a las desigualdades cristalizadas por su
funcionamiento. (Ortiz y Paredes, 2019, p. 94)
Lo expuesto,
cobra lugar en un periodo específico de apertura política y transformación
económica que reformula las demandas de tipos de conocimientos dada una
estructura productiva agroexportadora, no industrializada y, ante todo,
desigualitaria en términos de distribución de los recursos y las oportunidades,
ante lo cual la universidad no propone una redefinición de las reglas de
juego.
Al contrario,
la universidad, que tiene tanto la impronta institucional como discursiva, de
legitimación social, no se abstrae de su situación histórico-concreta, a saber,
un Estado orientado al liberalismo económico, una trayectoria autoritaria, el
proceso de mercantilización de la educación (y de otros derechos), cuyos
efectos en el sistema educativo superior se traduce en una lógica desigual de
acceso al conocimiento académico y científico, así como a las oportunidades que
la educación apuntala (Ortiz y Paredes, 2019). El escenario reciente habilitó
la emergencia de una cierta modificación en la distribución de esas
oportunidades educativas, así como de la información y conocimiento, en
concomitancia con la aparición y expansión a nivel mundial de las tecnologías
de la información y de la comunicación.
Varios factores
intervienen en la generación de un marco social e institucional que otorgue las
condiciones de posibilidad a la educación superior, en estrecha relación con el
escenario económico, social y político desde el cual pueda proyectarse su democratización
o bien que determine la persistencia de desigualdades históricas y la
producción de nuevas formas. El concepto de campo de Bourdieu (1984;
1989) aplicado a la educación superior es pertinente para entender estos
procesos, de modo que la universidad como campo disputa su autonomía relativa a
contracorriente de procesos tendientes a buscar su subordinación.
Houghton y
Sheehan (2000) indican que la economía del conocimiento contemporánea surge a
partir de dos fuerzas: el aumento de la intensidad de conocimientos aplicados a
actividades económicas, y un incremento de procesos de globalización, asociados
a la economía. Con los cambios intensivos de los conocimientos e innovaciones
aplicados en procesos de producción económica, se constata una transformación
de los patrones de consumo, de las instituciones y las expectativas educativas
de los diferentes sectores sociales. Esto es consecuencia de cambios
concomitantes de la lógica de la producción del conocimiento y de las formas de
circulación, que involucran nuevas tecnologías de la información y
comunicación. Éstas incidieron en una acelerada globalización económica, de
modo similar a la de los procesos de desregulación de fronteras asociados a la
circulación de bienes.
La economía del
conocimiento depende para el aumento de su productividad de cambios acelerados
en los procesos de conocimiento, sistemas descentralizados de producción y
ciclos constantes de innovación científica y tecnológica. Asimismo, implica
modalidades diferentes de formación profesional, disposiciones frente al uso
innovador de tecnologías, constante renovación y especialización, así como una
actitud reflexiva de la práctica profesional.
En esta
perspectiva, el papel esperado de la educación superior y de la universidad
cambia, generando expectativas que, al mismo tiempo que la demanda de acceso,
implican también una base de legitimidad inusitada respecto al pasado. A este
respecto, la sociedad paraguaya, basada en desigualdades extremas en el acceso
al trabajo, al conocimiento y a la ciudadanía, se resiste a admitir y tramitar
democráticamente los cambios inéditos y vertiginosos que tuvieron lugar a
escala mundial, así como a encauzar política e institucionalmente los
principios normativos.
2. La masificación de la educación superior y los cambios institucionales en
Paraguay
La primera universidad
paraguaya, a saber, la Universidad Nacional de Asunción (UNA), cuya fundación
data de 1889, tuvo una orientación inicial «profesionalizante», claramente
marcada por la necesidad de disponer de profesionales después de la guerra de
la Triple Alianza (1864-1870). Las actividades de investigación no tenían la
importancia que tendrían en otras latitudes; de hecho, en la UNA prácticamente
no existió en sus inicios. En este sentido, casi por medio siglo, hasta los
años después de culminada la guerra del Chaco (1932-1935), la universidad
paraguaya se abocó a la formación de profesionales liberales (Ortiz y Paredes,
2019). Como sostiene Brítez (2014), la educación superior paraguaya era
funcional a la élite política liberal, por lo tanto, se organizaba para
asegurar un modelo de dominación, además;
Buscaba
legitimar y preservar en el tiempo un estilo de dirección política, por
lo que la Universidad no produjo un avance de las ciencias ni una
tecnología que pudiera aplicarse para incrementar la producción, ni
descubrimientos materiales, ni siquiera teorías sobre cómo funciona y se
construye un Estado. (Serafini et al., 1989, p. 34)
De acuerdo con
Luis Galeano (2006), la universidad en Paraguay:
[Ha] sido, a lo
largo de su historia, una institución cuya función central ha sido la
profesionalización, es decir, impartir enseñanza para formar profesionales (…).
Aun las disciplinas de carácter humanista, como Historia, Filosofía, Pedagogía,
etc., básicamente se orientaron hacia la formación de docentes, especialmente
dirigida a la enseñanza media. (p. 25)
La Universidad,
ante la dificultad de dar respuesta a los crecientes retos y necesidades de la
sociedad paraguaya, fue perdiendo el monopolio de su función de formación de
dirigentes inmediatamente después de la Guerra del Chaco (1932-1935). Empezó a
cobrar lugar, desde entonces, la politización partidaria en detrimento de la
autonomía académica, por lo que los gobiernos militares y algunos civiles
trataron de controlar la universidad, lo que efectivamente ocurre desde los
años 40 del siglo XX, asumiendo desde entonces un papel profesionalizante,
selectivo social y políticamente, así como orientado a tomar partido en
cuestiones nacionales (Serafini et al., 1989, p. 35).
A partir de
1954, se delimita esta connivencia entre universidad y sistema político, con la
predominancia de la Asociación Nacional Republicana (Partido Colorado), que
asume el control de la universidad como una institución subordinada al régimen
autoritario. En este marco, «los títulos se constituyen en garantía de acceso a
la burocracia estatal, a condición de que vayan acompañados de inequívoca
muestra de lealtad, por lo general a través de la afiliación obligatoria al
partido oficialista» (Serafíni et al., 1989, p. 36).
A mediados de
la década del setenta del siglo XX, bajo el auspicio de organismos
internacionales, se inicia un proyecto de reforma, dirigida a racionalizar y
profesionalizar la educación universitaria, que se implementa parcialmente en
la Universidad Nacional de Asunción con base en la recomendación de la Misión
Burns.[1] Sin embargo, el
proyecto tuvo un resultado limitado que no impactó en el cambio del modelo de
educación y su relación con el Estado autoritario, pues prevaleció la
transmisión de un conocimiento legitimado.
A inicios de la
década del sesenta se fundó la Universidad Católica Nuestra Señora de la
Asunción, que fue la primera entidad de educación superior privada y, en este
carácter, una universidad alternativa a la Universidad Nacional Asunción bajo
el régimen autoritario de la dictadura estronista. Sin embargo, el modelo
instituido por la UNA se estableció por ley para obligar a equiparar los planes
y programas de la Universidad Católica a los suyos.
Finalmente, a
principios de los años 90 del siglo XX, de manera posterior a la caída del
régimen autoritario, se dio la apertura desmesurada de entidades privadas de
educación superior. Los criterios de apertura de nuevas entidades de educación
superior se flexibilizaron ante la incapacidad de organismos de rectoría y
control que se conformaron, paulatinamente durante la democracia, para
organizar la creciente demanda educativa (el caso del «Consejo de
Universidades»).[2]
Dicho escenario
daba cuenta de una desorientación frente a las nuevas exigencias y demandas,
dado el aumento de la población en edad de acceso a la educación superior y la
concomitante escasez de recursos de las universidades, se inscribió en la
discusión, a nivel internacional, sobre los problemas y desafíos de la
educación superior, que se vería plasmada en documentos como la Conferencia
sobre la Educación Superior de La Habana, o bien la Conferencia sobre la
Educación Superior, en París, en 1998 (patrocinada por la Unesco).
Con los
desafíos que se generaron a raíz de la apertura democrática en la sociedad
paraguaya, la Convención Nacional Constituyente elaboró la Constitución
Nacional del año 1992, en la cual se establecieron varios capítulos referidos a
los derechos, entre ellos el derecho a la educación. La Carta Magna hace
posible el reconocimiento del derecho a la educación integral y permanente, las
garantías al derecho de aprender y la libertad de enseñar, la responsabilidad
de hacer accesible la educación a la sociedad, involucrando a la familia y el
Estado, en especial el gobierno local; el establecimiento del principio de
gratuidad de la educación y la provisión de programas de apoyo a la gratuidad
como el del complemento nutricional y el suministro de útiles escolares para
estudiantes con necesidades, así como la dotación de una proporción
presupuestaria mínima del Presupuesto General de Gastos a la educación
(artículos 73 al 85).
3.
El acceso a la educación superior: aranceles y gratuidad
El sistema de
educación superior paraguayo no cuenta con una política unificada de régimen de
admisión a la universidad, sino que admite diversos modos de ingreso que, grosso
modo, se distinguen en dos vías: las seguidas por las universidades de
gestión pública y las de gestión privada. En las primeras, el común denominador
es el examen de ingreso, con un curso de admisión o sin él. No existe la
exención completa de gastos propios por parte del estamento estudiantil, sino
que en algunos estadios y para algunos procesos se exige la erogación de
aranceles. Emerge, por lo tanto, el problema de los recursos financieros que, a
pesar de tratarse de instituciones públicas, afecta a sectores de la población
en edad estudiantil, en situación desfavorecida de acceder a los niveles
superiores de educación.
Las universidades
cuentan con fondos de apoyo financiero (becas), que por lo general atienden los
costos de aranceles solamente. En las universidades de gestión privada, se
establecen servicios de «bienestar estudiantil», desde los cuales se destinan
fondos de subvención para el acceso y la estancia (por lo general
insuficientes). En las universidades públicas (llamadas «universidades
nacionales»), su financiamiento proviene del Presupuesto General de Gastos del
Estado. Aproximadamente el 83 % del costo total del gasto universitario es
financiado con fondos del tesoro público, mientras que los recursos propios
contribuyen con el 17 %. Casi un 90 % de estos suponen la percepción, por parte
de las universidades, de aranceles al estamento estudiantil, desde la etapa
previa al ingreso hasta la etapa posterior a la culminación de la carrera de
grado; el 10 % adicional es resultado de ingresos por la provisión de bienes y
servicios a cargo de las universidades en cuestión (Nunes, 2013).
El problema de
la erogación estudiantil de gastos en concepto de aranceles fue interpelado por
una serie de movilizaciones estudiantiles (con su punto culminante en 2020), en
las que se reivindicó el derecho al acceso a la universidad pública sin costo alguno
bajo el eslogan de Arancel Cero. Como consecuencia de esas movilizaciones, el
Congreso Nacional Paraguayo sancionó la Ley N.° 6628/2020, promulgada por el
presidente de la república, en la que se establece la gratuidad de los cursos
universitarios de grado desde el nivel de admisión en las entidades públicas de
educación superior. La ley rige para estudiantes egresados de establecimientos
educativos de gestión pública y de gestión privada subvencionada, aunque pueden
acogerse también al beneficio de la normativa los egresados de establecimientos
secundarios privados a condición de hallarse en situación económica
desfavorecida.
A diferencia de
países del MERCOSUR como Argentina y Uruguay, con antigüedad y altos niveles de
desenvolvimiento del sistema de educación superior, las universidades públicas
en Paraguay se encaminan apenas recientemente a fortalecer su carácter público,
a partir del subsidio del Estado previsto en la Ley N.° 6628 referida. Dado que
sus planificaciones presupuestarias, según el origen y fuente, prevén ingresos
menores a la proporción media recaudada por medio de aranceles, el efecto de la
gratuidad en la institucionalidad no será inicialmente marcado, pero habrá
iniciado el proceso de concreción y sedimentación del principio del derecho a
la educación pública en sus estatutos y resoluciones (Molinier, 2016).
En las
universidades de gestión privada, que cuentan con requerimientos mínimos de
admisión, se plantea un perfil de ingreso que no está normalizado por agencias
públicas de evaluación y acreditación, sino que se basa en acuerdos tácitos en
el sector privado de entidades de educación superior, según los cuales las
carreras aplican indicadores de requerimientos mínimos (Mora, 2019). Si fuera a
establecerse un perfil de admisión, se requiere una normativa que rija todas
las entidades de educación superior, sean de gestión pública o privada, para
normalizar los criterios del acceso.
A este
respecto, el problema de las condiciones sociales de las personas postulantes,
además de la variedad de transcursos escolares en la etapa preuniversitaria
–por lo general afectados por la capacidad adquisitiva, el capital cultural y
el perfil socioeconómico de los establecimientos secundarios–, plantea la
problemática de un sistema estandarizado de nivelación (ciclo básico común)
para las disciplinas y/o para las facultades de todas las entidades de
educación superior, además del establecimiento de un programa de mentoría
pedagógica de inducción y supervisión al transcurso universitario en sus fases
iniciales.
4. Las subvenciones y transferencias en la Universidad Nacional de Asunción
Existen tres
principales actores públicos que implementan programas de transferencia a los
que acceden los estudiantes de grado de la Universidad Nacional de Asunción
(UNA): 1) el Ministerio de Educación y Ciencias, mediante el Consejo Nacional
de Becas, 2) Itaipú Binacional y, 3) el Rectorado de la Universidad Nacional de
Asunción. Puede señalarse que universidades públicas y privadas, en diversa
medida, se benefician de los fondos de becas del Ministerio de Educación y
Ciencias y entidades binacionales.[3]
Las becas del
rectorado de la Universidad Nacional están reguladas por su reglamento interno
de becas (Resolución N.° 0272-00-2015). Estas, tienen como propósito otorgar a
estudiantes y egresados de la UNA, con criterios de logro académico específico
o por «insolvencia financiera», apoyos de tipo económico mediante la
exoneración de aranceles.[4] Las primeras son dadas si
los estudiantes tienen calificaciones por encima del 75 % de su promoción. Las
otorgadas por «insolvencia» suponen un estudio de la situación social del
postulante a fin de verificar sus características de escasos recursos. La
renovación de estas subvenciones no tiene un límite de postulaciones durante la
carrera universitaria y se da al final de cada periodo lectivo anual,[5] coincidiendo su
definición con el periodo de aprobación anual del presupuesto de gastos
para la UNA. Por ejemplo, si la carrera tiene un periodo lectivo semestral, el
postulante debe solicitar su renovación dos veces al año. Estas exoneraciones
de matrículas, cuotas o multas a veces se dan de manera parcial, limitándose a
un tipo de arancel.
La
disponibilidad de fondos asignados anualmente a cada una de las unidades
académicas supone variaciones en la asignación y en la cantidad de becas
disponibles. Debe precisarse que dichas transferencias se limitan a estudiantes
destacados (poseyendo notas entre el 25 % de los promedios más elevados) que
declaren formas de «insolvencia económica», limitándose a aquellos estudiantes
que ya han accedido a la institución educativa.
De acuerdo con
Filippi y Paredes (2019) el número de beneficiados por dichas becas desde el
2004 ha sido de más de 10.000 estudiantes. Del monto otorgado el 90 %
corresponde a becas de grado (p. 65). En este sentido, «las exoneraciones
de aranceles totales o parciales dirigidas a estudiantes se conceden bajo
diferentes tipos de condiciones, limitándose a beneficiarios de convenios o de
estratos socioeconómico medio, medio bajo, y bajo» (p. 65).
Por otra parte,
el Ministerio de Educación y Ciencias implementa a través del Consejo Nacional
de Becas un programa de «Apoyo económico a estudiantes de carreras de grado».
Dicho programa se enmarca en los lineamientos establecidos por la Ley N.°
4842/2013, que regula las becas administradas por el Estado, la Ley N.°
4995/2013 de Educación Superior, y la Resolución N.° 16146/2018 que reglamenta
el funcionamiento de Instituciones de Formación Docente.
En agosto de
2018, de acuerdo con la Resolución N.° 35512 del MEC, nuevos becarios
beneficiados de universidades privadas y nacionales se beneficiaron de un pago
único. Según el análisis presentado en el reporte Financiamiento Público de la
Educación Superior (Vera Notario et al., 2019) «el monto total disponible
para becas de estudios que figura en el presupuesto del MEC es de USD 2.395.922
(13.986.350.000 de guaraníes) [donde] el 60 % [...] se destina a la educación
superior» (p. 128). A pesar de limitaciones en relación con los subsidios
otorgados, estos se dirigen a los gastos académicos (matrículas, cuotas,
materiales didácticos). Como señala Molinier (2016), puede considerarse que
estas proveen un alivio para los gastos de familias pobres, extremas y no
extremas, así como las de nivel medio (p. 20).
El programa de
selección para Becas de Itaipú Binacional supone la realización de un examen de
competencias básicas para los postulantes, dando preferencia, en su reglamento,
a aquellos provenientes de zonas empobrecidas del país y de familias de escasos
recursos.
El examen está
centrado en las áreas de matemáticas y lengua castellana, realizándose como
paso previo al análisis socioeconómico de las postulaciones. De igual manera,
las pruebas establecen ajustes en términos de niveles de competencia a
aspirantes de pueblos originarios o aquellos con algún tipo de discapacidad.
Sin embargo, dichas consideraciones hacia colectivos vulnerables no son
necesariamente observadas en la práctica.
Es importante
señalar que las becas de Itaipú Binacional consideran la adecuación de las
condiciones de acceso a postulantes de sectores vulnerables específicos.[6] Pero, esto no parece
observarse sistemáticamente, como lo señalan Talavera y Gaona (2013), en la
convocatoria a becas del año 2013:
Entre los
requisitos de Itaipú se menciona la «cédula indígena, si aplica y procede»,
aunque en ningún apartado previo o posterior se menciona o explícita para qué
supuestos se aplicaría y procedería. El documento de la convocatoria no circula
ampliamente, y en cualquier caso, su contenido no es accesible puesto que los
entrevistados desconocían la excepcionalidad hacia los indígenas respecto al
promedio. Si bien los representantes institucionales entrevistados
explicitan que en la formulación de las convocatorias se busca atender a las
comunidades indígenas, por las diferencias educativas reconocidas, esto no se
produce de forma efectiva en la práctica. (p. 21)
Las becas de Itaipú
incluyen apoyos desde la preparación para el ingreso a la universidad. En el
2018 esa asignación ascendía a un monto de 4.500.000 guaraníes anuales
(aproximadamente 790 dólares).
Las becas
nacionales para estudiantes de grado tienen como lógica subyacente la provisión
de algún tipo de complemento o apoyo financiero en todas las actuaciones
públicas referidas. Todas las becas pueden considerarse como apoyos económicos
suplementarios, en mayor o menor medida, asociados a los gastos académicos
directos de los becarios.
La inversión
pública en asistencia financiera para el acceso y permanencia en
universidades en Paraguay, a pesar de considerar el criterio de necesidad
financiera como elemento central y observarse un aumento sustancial de la
cantidad y diversidad de fondos disponibles en las pasadas décadas, no
está focalizada para favorecer a colectivos más vulnerables en programas
sistemáticos de «discriminación positiva» o «acción afirmativa» en forma de
transferencias monetarias, a pesar de que las universidades están obligados a
incorporar indígenas destinando una proporción de plazas en la matrícula
(Talavera y Gaona, 2013).
Es importante
destacar que, en Paraguay, continúan observándose en la política pública e
institucional elementos señalados por Caballero y Rojas (2012) en el
diagnóstico nacional del Proyecto Política de Equidad y Cohesión Social en
la Educación Superior (RIAIPE 3):
No existen en
los Marcos Legales Nacionales Macro, referencias específicas y operativas
respecto al tratamiento abordaje e incorporación de la problemática, eje
transversal, etc., de la igualdad de oportunidades – vulnerabilidad / exclusión
(jóvenes de las zonas rurales – desigualdad – pobreza), del eje
inequidad-equidad, de género e inclusión indígena dentro de la política de la
ES y las IES –como cobertura legal de los derechos de los grupos vulnerables;
convenios de acción afirmativa; declaraciones explícitas de regulación–. (p.
107)
Entonces, estas
condiciones políticas de becas pudieran no generar situaciones de mejora en las
condiciones de equidad y permanencia de acceso a la ES de colectivos en
situación de vulnerabilidad.
5. Políticas remediales en la Universidad Nacional de Asunción
Las acciones de
formación remedial observadas en la Universidad Nacional de Asunción pueden
observarse en los llamados cursos propedéuticos durante las etapas de ingreso a
la Universidad, usualmente bajo la forma de «cursos de nivelación» en la etapa
preparatoria a los exámenes de entrada a sus diversas unidades académicas y en
las medidas de «seguimiento a estudiantes» organizadas al interior de cada
Facultad. Por ejemplo, la Facultad de Ciencias Económicas (2017) indica
en su página que el «Curso Probatorio de Admisión es un primer nivel académico
de estudios generales para el ingreso a las carreras que se estudian allí. Es
un curso propedéutico y no otorga crédito alguno para las carreras propiamente
universitarias».
Parra (2012)
indica tres configuraciones primarias de los sistemas de acceso a la
Universidad en Paraguay: «curso probatorio de ingreso de carácter eliminatorio,
curso de admisión no eliminatorio y acceso directo» (p. 18). En este sentido,
«existen varias modalidades de acceso utilizadas y pueden variar entre
facultades o carreras de una misma universidad, de acuerdo con la disciplina,
fundamentalmente» (p. 8). En el caso de las 14 unidades académicas de la UNA,
siguiendo a Mora Rojas (2019), pueden observarse:
a) Admisión mediante exámenes
de ingreso, con preparación autónoma de los postulantes,
b) Admisión mediante
exámenes de ingreso, con preparación de los postulantes mediante cursillos o
tutoriales, ofertados por la institución, sin ser éstos de realización
obligatoria,
c) Admisión mediante
exámenes de ingreso, con preparación de los postulantes mediante cursillos
ofertados por la institución, de realización obligatoria, y
d) Cursos
Probatorios de Ingresos y Cursos Propedéuticos. (p. 93)
Al mismo
tiempo, es observable que en «todos los casos [están] previstas acciones de
nivelación con el estudiante matriculado en la institución, que pueden o no,
formar parte de la propia carrera universitaria» (p. 8). Por ejemplo, el
programa de la Facultad de Ingeniería (FIUNA) «Yo voy a ser ingeniero» se
desarrolló explícitamente para reforzar áreas de conocimiento de estudiantes de
la media en orden a mejorar la preparación de estos para el ingreso a dicha
unidad académica.
Todos estos
espacios propedéuticos, de nivelación o remediales se dan en un contexto de
desconexión o falta de articulación entre los programas desarrollados en el
nivel básico y medio, y lo evaluado en las pruebas de admisión. Tal como lo
señalan Ayala de Mendoza et al. (2016) para la Facultad de Medicina «se
percibe que en el sistema de admisión actualmente implementado no existe
relación entre los programas desarrollados en el nivel escolar básico y medio y
los programas de las asignaturas incluidas en los exámenes de admisión» (p.
19).
Debilidades
identificadas en la preparación básica de los estudiantes para el acceso a la
educación superior se expresan en los contenidos recurrentes de los programas
de nivelación. Las modalidades del propedéutico comúnmente comprenden cursos
probatorios de ingreso que incluyen a las materias de Matemática, Comunicación
y otras asociadas a la disciplina de la carrera a elegir, operando como
iniciativas de cada Facultad regidas por diversidad de normativas
institucionales de admisión. Por ejemplo, la Facultad de Enfermería y
Obstetricia, contempla en sus reglamentos de admisión contenidos de exámenes de
ingreso sobre las materias de Matemática, Comunicación Oral y Escrita, Química
y Ciencias Naturales (Resolución N.° 0230-00-2018 del CSU de la UNA, 2018).
Esto se debe a
que la organización de estos cursos de ingresos opera bajo el amparo de una
«autonomía académica» donde, según los estatutos de la UNA, las unidades
académicas son responsables del tipo de admisión de los estudiantes a sus
respectivas carreras.
Esta misma
situación de divergentes configuraciones puede observarse en las acciones
remediales como cursos, espacios de «repaso» o asesoramiento asociadas a las
actividades de «seguimiento a estudiantes» que se dan al interior de cada
Facultad. Es preciso apuntar que esta diversidad se ve también reflejada
en la variedad de proyectos de ajustes o reforma curricular que se dan como
decisiones de gobierno de cada unidad académica para cada una de las carreras
que ofrece la UNA.
En términos de
educación remedial la UNA no parece disponer de programas estandarizados,
observándose una variada diversidad de configuraciones, usualmente asociadas al
acceso o preparación para el acceso a la Universidad y acciones diversas de
apoyo académico al interior de cada Facultad. Por ejemplo, en el transcurso de
la carrera diversas unidades académicas proveen clases de refuerzo,
asesoramiento, tutorías o mentorías que pueden tener un carácter
remedial.
Conclusión
Además de los
problemas tradicionales de inequidad ligados a la estratificación
socioeconómica, emergieron nuevas asociadas a las regiones geográficas que no
pudieron atenuarse con las políticas de desconcentración y expansión de las
entidades de educación superior a nivel territorial, generadas para atender la
demanda en el interior del país y para enfrentar la captura de demanda de las
entidades de gestión privada. Este tipo de desigualdad educativa afecta
las condiciones económicas, en especial del desarrollo de la estructura
productiva y la absorción de fuerza laboral con competencias acordes a la
internacionalización del conocimiento y del mercado de trabajo (Brítez, 2014).
La organización
de la UNA, en cuyo seno tienen lugar las trayectorias educativas de los
ingresantes, da cuenta de la existencia de una compleja variedad de situaciones
y adaptaciones institucionales. Este es un marco en el cuál una serie de
normativas, con diversos niveles de reglamentación, son interpretadas y
asumidas por las distintas unidades académicas de la universidad, de acuerdo
con los rasgos de sus ofertas y modalidades de atención.
Un caso es la
naturaleza de los programas remediales en las distintas facultades y carreras,
en cuyas instancias el acompañamiento no constituye una política homogénea en
toda la universidad, que sea claramente discernible en términos de lineamientos
normativos generales en términos, por ejemplo, de la relación al ingreso entre
docentes universitarios y estudiantes. Esta dispersión de criterios por
unidades académicas o, incluso, por carreras, hace lugar a diferentes
interpretaciones sobre el asesoramiento a los estudiantes.
Las acciones remediales, para ciertas carreras, parecen operar como un mecanismo
que busca asegurar una mínima compensación de condiciones para aquellos que
buscan acceder a la universidad en la intención de aumentar los niveles de
retención de estos en la carrera elegida. La obligatoriedad de los
programas de ingreso, en modalidades dispersas y no estandarizadas, es la
característica de la Universidad Nacional de Asunción, dado que la población
estudiantil, marcada por la desigualdad social, arrastra un problema de
segregación en la educación escolar básica, así como un bajo volumen de acceso
a la educación superior.
En este marco,
los limitados recursos previstos en la UNA para destinar a la atención de
situaciones de desigualdades que afectan a la continuidad de estudios se
traducen en transferencias indirectas dirigidas a una parte minoritaria de la
población estudiantil. Las oportunidades de acceso a recursos económicos y
apoyos pedagógicos a estudiantes parecen generarse de acuerdo con las
capacidades y dinamismos internos de cada unidad académica, al peso asignado a
la carrera por parte de las autoridades de la universidad según el criterio del
volumen de la matrícula, así como consideraciones sobre su «beneficio social»
percibido por las autoridades, afectando las asignaciones
presupuestarias.
Las unidades
académicas con mayores recursos asignados en esta lógica son aquellas que tiene
uno o varios de los siguientes elementos: a) un número elevado de matriculados
b) gestores dinámicos e influyentes y c) la provisión de un servicio público
externo a la universidad considerada importante. Dado el rasgo prevaleciente de
la universidad, de que cada unidad académica tiene sus propias modalidades
–tradicionales– de políticas de inclusión, la eficacia para asegurar las
trayectorias estudiantiles sin interrupciones queda sujeta a factores
extraacadémicos y sin un formato institucional integral. La compartimentación
de la UNA en su actuación en políticas de inclusión no permite abordar los
problemas de acceso, permanencia y egreso (en plazo) a nivel global de manera
estandarizada, coherente y con proyección de largo plazo, lo que constituye uno
de los principales desafíos de la política universitaria.
Referencias
bibliográficas
Ayala
de Mendoza, F., Florentín de Merech, L., Villalba, C. J., Torales, J., Macchi
de Lezcano, A. y Melgarejo, G. (2016). Análisis situacional del proceso de
admisión a la Carrera de medicina y cirugía de la Facultad de Ciencias Médicas
de la Universidad Nacional de Asunción: Itinerarios, instrumentos de admisión y
perfil del ingresante. Anales de la Facultad de Ciencias Médicas (Asunción),
49 (1), 17-38.
http://dx.doi.org/10.18004/anales/2016.049(01)17-038
Bourdieu,
P. (1984). Homo Academicus. Les Éditions de Minuit.
Bourdieu,
P. (1989). La noblesse d'état. Grandes écoles et esprit de corps. Les
Éditions de Minuit.
Brítez,
R. (2014). Reforma institucional y diversificación de los sistemas de Educación
Superior: el caso de Paraguay. Integración y Conocimiento, 3. https://revistas.unc.edu.ar/index.php/integracionyconocimiento/article/view/9245
Caballero
Merlo, J. N. y Rojas Méndez, M. (2012). Conceptos y praxis en el desarrollo de
la experiencia de investigación e intervención socio educativa. Revista
Internacional de Investigación en Ciencias
Sociales, 8 (1), 101-118. http://revistacientifica.uaa.edu.py/index.php/riics/article/view/16
Consejo
Nacional de Educación y Cultura (CONEC). (2016). Situación de la Educación
Superior Paraguaya: Año 2015 (Informe del Consejo Nacional de
Educación y Cultura). http://web.archive.org/web/20220619020139/http://www.conec.gov.py/application/files/1215/2389/5492/11-InformSitEducPya_2015-34.pdf
Consejo
Nacional de Ciencia y Tecnología. (2016). Estadísticas e indicadores de
Ciencia y Tecnología de Paraguay: 2014-2015. https://bit.ly/3DU1CVr
Czeraniuk,
F., Cantoni, R., Thiebeaud, N. y Denis, M. (2019). Burocratización de la
convalidación académica en Paraguay vs capital humano cualificado. Revista
Educación Superior y Sociedad, 30 (30), 158-175. http://www.iesalc.unesco.org/ess/index.php/ess3/article/download/103/99
Dirección
General de Estadística, Encuestas y Censos. (2019). Anuarios Estadísticos
1990-2019. https://www.ine.gov.py/default.php?publicacion=16
Facultad
de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Asunción. (2017). Curso
Probatorio de Admisión. Recuperado el 18 de marzo 2017, de https://www.eco.una.py/index.php/admision/requisitos
Fernández,
T. (2009). La desafiliación en la educación media en Uruguay. Una aproximación
con base en el panel de estudiantes evaluados por PISA 2003. REICE: Revista
Iberoamericana sobre Calidad, Eficacia y Cambio en Educación, 7 (4),
164-179. https://www.redalyc.org/pdf/551/55114094009.pdf
Filippi
Sanabria, C. y Paredes, M. G. (2019). Perspectiva comparada de la equidad
en las instituciones de educación superior. En A. Barrera Corominas, D. Castro
Ceacero y G. Granda (2019). La Universidad y colectivos vulnerables. Hacia
una cultura de la equidad. PENCLIPS.
Galeano,
L. (2006). Situación actual y tendencias de la educación superior: Bases
para una nueva Ley General de Educación. CONEC.
Garay,
R. (2006). Estudios de postgrado en el Paraguay. El diagnóstico y las
perspectivas. En Cristaldo, Ma. Evangelista (Coord.). Aspectos relevantes de
la dinámica de la Universidad Nacional de Asunción. UNA, IESALC, Unesco.
Houghton, J. y Sheehan, P. (2000,
febrero). A Primer on the Knowledge Economy [CSES Working Paper, No.
18]. National Innovation Summit, Melbourne, Australia. https://vises.org.au/documents/Wp18.pdf
Ley
N.° 4842, Que regula las becas otorgadas y/o administradas por el Estado, Modifica
la estructura y funciones del nuevo Consejo Nacional de Becas y deroga la Ley
N.° 1397/99 «Que crea el Consejo Nacional de Becas». (2013, 25 de enero). Congreso Nacional
del Paraguay. https://www.bacn.gov.py/leyes-paraguayas/955/regula-las-becas-otorgadas-yo-administradas-por-el-estado-modifica-la-estructura-y-funciones-del-nuevo-consejo-nacional-de-becas-y-deroga-la-ley-n-139799-que-crea-el-consejo-nacional-de-becas
Ley
N.° 4995, De Educación Superior. (2013, 2 de agosto). Congreso Nacional del Paraguay. https://www.bacn.gov.py/leyes-paraguayas/4401/ley-n-4995-de-educacion-superior
Ley
N.° 6628, Que establece la gratuidad de los cursos de admisión y de grado en
todas las universidades públicas del país, en el Instituto Superior de Bellas
Artes, Instituto Nacional de Educación Superior, en institutos de formación
docente, dependientes del Ministerio de Educación y Ciencias y en el Instituto
Nacional de Salud y modifica los artículos 3°, 5° y 6° de la Ley N.° 4758/2012,
y modificatorias. (2020,
19 de octubre). Congreso Nacional del Paraguay. https://bit.ly/3JLRrW6
Molinier,
L. (2016). El derecho a la educación y el gasto público en Paraguay.
SERPAJ. http://desarrollo.org.py/admin/app/webroot/pdf/publications/15-09-2017-10-08-48-521760557.pdf
Mora
Rojas, C. O. (2019). Políticas de ingreso a las universidades. Revista
Científica de la UCSA, 6 (1), 88-96. http://scielo.iics.una.py/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S2409-87522019000100088&lng=es&nrm=iso&tlng=es
Nunes,
A. (2013). Hacia una universidad pública verdaderamente gratuita.
Congreso de Universidades Públicas 2013. Ciudad del Este, Paraguay. http://www.une.edu.py/congreso11/images/stories/ARANCEL_CERO-Dr_Anibal_Amado_Nunez.pdf
Ortiz,
L. y Paredes, M.G. (2019). El desempeño en la trayectoria académica de los
ingresantes a la Universidad Nacional de Asunción (2014-2016), Revista
Paraguaya de Educación, 8 (1), 89-98. https://oei.int/oficinas/paraguay/publicaciones/revista-paraguaya-de-educacion-numero-8-1
Parra,
O. (2012, junio). Los sistemas de acceso, normativas de permanencia y
estrategias de tutoría y retención de estudiantes de educación superior en
Paraguay: Informe Nacional [Folleto]. Proyecto Accedes. http://accelera.uab.cat/accedes/docs/informes/paraguay.pdf
Resolución N.° 0272-00-2015, Por el cual se modifica el Reglamento General de Adjudicación de Becas. (2015). Consejo Superior Universitario de la Universidad Nacional de Asunción. http://web.archive.org/web/20210618151455/https://www.una.py/actas_csu/documentos/4321
Resolución
N.° 0230-00-2018, Por la cual se modifica la Resolución 00597-00-2011 que
homologa el Reglamento de Admisión de la carrera de Enfermería. (2008). Universidad Nacional de
Asunción.
https://www.fenob.una.py/images/pdf/reglamento/admisionfiliales.pdf
Resolución
N.° 16146, Por la cual se aprueba el Reglamento de Organización y
Funcionamiento de las Instituciones Formadoras de Docentes de Gestión Oficial,
Privada y Privada Subvencionada de este Ministerio. (2018, 9 de mayo). Ministerio de Educación
y Ciencias, Paraguay.
https://www.mec.gov.py/sigmec/resoluciones/16146-2018-AGUILERA.pdf
Resolución
N.° 35512, Por la cual se autoriza a la Dirección General de Administración y
Finanzas del Ministerio de Educación y Ciencias, a proceder al pago en concepto
de becas a los estudiantes del nivel de educación superior -primera vez-,
adjudicados por el Consejo Nacional de Becas, matriculados en universidades
educativas de gestión pública y privada del país, correspondiente a pago único
del ejercicio fiscal 2018.
(2018). Ministerio de Educación y Ciencias. http://www.mec.gov.py/cms_v2/resoluciones/285555-35512-2018-aguilera1
Rivarola,
D. (2000). La reforma educativa en Paraguay
[Folleto]. Comisión Económica para América Latina y el Caribe. https://www.cepal.org/sites/default/files/publication/files/5972/S00090772_es.pdf
Rivarola,
D. (2003). La educación superior universitaria en Paraguay. Ministerio de
Educación y Cultura, IESALC. https://unesdoc.unesco.org/ark:/48223/pf0000149229
Robledo
Yugueros, R. (2016). Informe Nacional: Paraguay. Educación Superior en
Iberoamérica. CINDA. https://cinda.cl/wp-content/uploads/2019/01/educacion-superior-en-iberoamerica-informe-2016-informe-nacional-paraguay.pdf
Serafini,
O., Lafuente, C. L. y
Rivelli, D. (1989). La universidad paraguaya y sus egresados: un estudio de
seguimiento. Centro Interdisciplinario de Derecho Social y Economía
Política, Universidad Católica.
Talavera
Reyes, C. y Gaona López, I. (2013). Políticas públicas y derecho a la
educación de los pueblos indígenas en Paraguay. Evaluación de la implementación
y alcance de las becas estatales para acceso a la universidad. CLACSO. http://biblioteca.clacso.edu.ar/clacso/becas/20131219095507/01.pdf
Vera Notario, M.
B., Charotti, O. y Dos Santos, M. F. (2019). Financiamiento
Público de la Educación en Paraguay: Notas para el debate de la construcción de
la política pública. Observatorio Educativo
Ciudadano, Juntos por la Educación.
https://www.observatorio.org.py/informe/45
Autores
Luis Ortíz Sandoval
Sociólogo. Doctor en Sociología por la Escuela de Altos Estudios
en Ciencias Sociales (Francia). Magister en Ciencias Sociales por la Facultad
Latinoamericana de Ciencias Sociales (México). Investigador en ciencias
sociales. Autor de 10 libros y más de 50 artículos de publicación nacional e
internacional, la mayoría en revistas arbitradas e indexadas. Fundador e
investigador del Instituto de Ciencias Sociales (ICSO). Dirige la Revista de
Investigación en Ciencias Sociales (REVICSO). Fue académico visitante en The
New School for Social Research, de Nueva York durante el año académico
2018-2019. Docente de la Facultad de Ciencias Sociales (FACSO, UNA), así como
de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO, Paraguay).
Fundador y 1.er presidente de la Asociación Paraguaya de Sociología
(APS). Miembro de número de la Sociedad Científica del Paraguay. Investigador
categorizado del Programa Nacional de Incentivo a la Investigación (PRONII),
nivel II.
Rodrigo Brítez
Sociólogo. PhD en Educational Policy Studies por la Universidad de
Illinois at Urbana Champaign (Estados Unidos). Magíster en Educational Policy
Studies por la misma universidad. Es investigador en ciencias sociales y autor
de artículos de publicación nacional e internacional, la mayoría en revistas
arbitradas e indexadas. Es fundador e investigador del Instituto de Ciencias
Sociales de Paraguay (ICSO). Director de Investigación de la Dirección General
de Investigación Educativa del Ministerio de Educación y Ciencias (Paraguay).
Miembro del Consejo de Redacción de la Revista Paraguaya de Educación y de la
Revista de Investigación en Ciencias Sociales (REVICSO). Docente de la
Universidad Nacional de Asunción. Socio fundador de la Asociación Paraguaya de
Sociología (APS) y miembro de la American Educational Research Association
(AERA). Investigador categorizado del Programa Nacional de Incentivo a la
Investigación (PRONII), nivel I.
Esta obra se publica bajo
licencia:
Creative Commons BY-NC-SA 4.0 Internacional
(Reconocimiento – No comercial – Compartir igual)
ISSN-L 2224 7408
eISSN 3078 4913
[1] La Misión Burns es mencionada por Rivarola (2003)
como el origen de un informe elaborado en 1959, que sirve de ejemplo para
«diagnósticos o propuestas tendientes a modificar de alguna manera la
universidad» (p .54) y que conciernen a la Universidad Nacional de
Asunción. Este informe es el que Serafini, Lafuente y Rivelli (1989)
refieren al indicar «en base a la recomendación del Plan Burns» (p. 36)
una serie de reformas fueron aplicadas, buscando entre otras cosas «tecnificar
y racionalizar la educación superior universitaria», las que contaron con el
asesoramiento técnico de la Universidad de Campinas (Brasil) y del BID (p. 36).
[2] Según la Domingo Rivarola (2000) en 1980 el número de
la matrícula de estudiantes de tercer nivel en Paraguay era de 26 915, subiendo en 1997 a 36 734.
[3] Otros programas identificados proveyendo fondos de becas a nivel
nacional son los implementados por la Secretaría Nacional de la Juventud y
Yacyretã Binacional, a través de su Unidad de Becas.
[4] En el 2020 se promulgó la conocida como Ley de Arancel Cero,
según la cual los estudiantes de las universidades públicas están exonerados
del pago de cualquier tipo de arancel para su matriculación, permanencia y
promoción en la educación superior. Desde el 2021, la implementación de la Ley
está teniendo lugar, no sin algunos inconvenientes.
[5] Dicha renovación para el caso de becarios por
«excelencia», supone una documentación de matriculación y promedio de
calificaciones. En tanto que para aquellos de «insolvencia» supone una
documentación de su estado de precariedad económica y un estudio de su
situación por parte de un profesional de trabajo social. En ambos casos el
estudiante puede beneficiarse de dicha beca durante el transcurso de la
totalidad de su carrera.
[6] Es igualmente necesario mencionar que los programas de
Itaipú estuvieron salpicados por controversias periódicas sobre su acceso por
estudiantes provenientes de estratos económicos altos.